Fachadas sin encanto

El tiempo pasa para todos. Hasta para los edificios. Tanto en lo referente al interior como al exterior de los mismos. A la hora de elegir vivienda, cambiar de barrio o simplemente, por mera observación de las calles, las fachadas cobran sentido. ¿Alguna vez te has fijado en los materiales o en la tonalidad exacta de tu fachada? Es la piel de nuestra casa. A través de ella recibimos y perdemos energía. 

Debemos tener en cuenta la importancia de mantener un correcto y eficiente ahorro energético. Conseguir el confort y tranquilidad. No solo tener en cuenta el interior de nuestra vivienda. Digamos que, empezaríamos por el exterior. Seguiríamos por el interior. Finalizamos con todos aquellos detalles que hacen que, en conjunto, tengamos un hogar a nuestro gusto. 

Como se ha dicho, los edificios sufren también los estragos del paso del tiempo. Envejecen y van perdiendo fuerza. Imaginemos nuestra piel. Una piel en continuo contacto con los agentes externos. Agua, viento, sol… y sin recibir ningún tipo de descanso. Sin un bálsamo que calme los cambios y esas agresiones climáticas. ¿Resultado? Grietas, falta de vitaminas, arrugas… Si a eso, le añadimos el mero paso del tiempo; dolor de huesos y resfriados que nos resienten cada vez más, adoptando el «me duele la espalda» como forma de vida. 

Lo mismo le ocurre a las fachadas. Con el tiempo, se resienten. Reciben constantemente los agentes climáticos. Se resienten por dentro. Nos «aguantan» durante años. Y llega el día en el que los dolores salen a la luz.

Todo cuenta para una mejora completa

Si tomamos la determinación de  reformar un edificio o si, simplemente, es de urgente necesidad, comenzar por rehabilitar la fachada es una de las cuestiones más importantes.  

En el caso de Andalucía, la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del territorio publicó el 21 de Diciembre de 2020, la convocatoria en régimen de concurrencia competitiva, de subvenciones para la rehabilitación de edificios en la Comunidad Autónoma de Andalucía.

Tomamos en cuenta aspectos estructurales. Pero, en lo referente a la fachada resulta primordial garantizar unas óptimas condiciones contra incendios. Esto quiere decir que las fachadas deben cumplir con unas exigencias mínimas en cuanto a su resistencia al fuego que afectan sobre todo a los materiales de construcción.

Además, desde la Unión Europea están promoviendo normativas en materia de ahorro energético y desde el año 2012, a través de la directiva 2012/27/UE, se pretende que los edificios de nueva construcción o aquellos que se sometan a obras de rehabilitación mejoren su eficiencia energética para contribuir a la reducción de gases de efecto invernadero.

Sistema SATE

Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior, hace referencia al sistema utilizado para aislar térmica y acústicamente las fachadas por el exterior. 

Evita la aparición de puentes térmicos en el edificio, por lo que la inercia térmica del edificio mejora. En consecuencia, mejora la habitabilidad y el confort térmico dentro del edificio.

Realizar un aislamiento térmico en  la fachada con este sistema,  mejora el ahorro económico y energético. La ventaja que proporciona es la reducción de las pérdidas de energía que se producen a través de la fachada del edificio.

El sistema se basa en la combinación de diferentes materiales, como la  instalación de planchas de poliestireno expandido  o lana mineral en el grosor elegido. Se anclan las placas, se sellan y refuerzan las ventanas.  Se revisten las planchas de aislamiento con malla de fibra de vidrio. 

Conseguir una revalorización del edificio, proporcionar una mayor seguridad a la vez que, revistes de nuevos materiales. Esto, proporciona una mayor «esperanza de vida» al edificio. Es una técnica optima tanto para nueva construcción como para rehabilitaciones. Resulta la mejor opción en cuanto a calidad/precio. Es el equilibrio perfecto entre estética y rendimiento. 

Es importante, dejar en manos de especialistas que determinen exactamente las necesidades y prioridades del edificio. La ubicación del inmueble, el clima, su antigüedad y desgaste.

Pide presupuesto sin compromiso y revive la piel de tu hogar.