Protege tu vivienda contra las humedades

Publicado por Aislahogar en

Evita que la acumulación de agua y sus vapores dañen tu vivienda

Los vapores de agua y la condensación de estos en la estructura interna de tu vivienda pueden dañar y mucho todo su esqueleto, el aislamiento térmico contra humedades es una buena medida de prevención y cuidado ante estas agresiones.

El aislamiento térmico no solo sirve para mantener una temperatura estable dentro de la vivienda, y ahorrarnos dinero en nuestras facturas de consumo energético o librarnos de los molestos ruidos de nuestros vecinos. También puede evitarnos esas antiestéticas manchas negras en la pintura de nuestra vivienda, detener el peligroso deterioro que puede provocar en los cimientos de nuestro hogar y eliminar los dañinos hongos y esporas que nacen por la humedad y que podrían dañar nuestra salud.

En la época de grandes lluvias o simplemente en estaciones como por ejemplo el Otoño, la humedad que existe en el ambiente es bastante considerable. Este vapor de agua llega a penetrar sin problemas la fachada de nuestro edificio, llegando a ciertos puntos internos que no podemos alcanzar. Mediante el aislamiento insuflado conseguimos rellenar los huecos existentes en la estructura interna de cualquier construcción, sobre todo en edificios de doble fachada, los cuales son propensos a tener estos problemas, o cualquier otra vivienda o local comercial con problemas de construcción.

Es por esto que el aislamiento térmico contra humedades es una de las mejores opciones con las que podemos contar, si nos hemos dado cuenta de que nuestro edificio tiene este tipo de problemas.

La aplicación de aislamiento térmico contra humedades es muy recomendable en zonas donde las lluvias son muy intensas o seguidas, así como en viviendas unifamiliares o en la última planta de los edificios de pisos en donde los techos deben de aguantar este tipo de agresiones meteorológicas.

En Aísla Hogar somos expertos en la aplicación de este tipo de protección en todo tipo de edificaciones, y también en el aislamiento térmico de techos y partes superiores de los edificios.